Londres, con su icónica Torre y el bullicioso río Támesis, contrasta con la tranquilidad académica de Cambridge y la historia medieval de York. Edimburgo, coronada por su castillo, y Stirling, con su imponente fortaleza, son joyas escocesas al igual que Glasgow, famosa por su cultura. Belfast en Irlanda del Norte ofrece una rica herencia, mientras que Dublín vibra con su literatura. Galway y los impresionantes Acantilados de Moher son imperdibles en Irlanda, junto a Limerick y Cork. Liverpool destaca por su legado musical, Stratford por su conexión con Shakespeare, los Cotswolds por su pintoresca campiña y Oxford por su prestigiosa universidad.